Consejos de odontología preventiva para las enfermedades de las encías

¿Se pregunta si puede hacer algo para prevenir la enfermedad de las encías? Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), la enfermedad de las encías afecta a más de la mitad de los estadounidenses mayores de 30 años.

Las primeras fases de la enfermedad de las encías, como la gingivitis, pueden tratarse con una limpieza dental cada seis meses y buenas prácticas de higiene bucal en casa. Sin embargo, si el problema ha progresado a enfermedad periodontal, es incurable. Afortunadamente, con la odontología preventiva, que requiere el esfuerzo conjunto del dentista y el paciente, es posible prevenir o reducir el riesgo de enfermedad de las encías. Siga leyendo para conocer algunos consejos útiles.

Consejos para prevenir las enfermedades de las encías

A continuación se ofrecen consejos de odontología preventiva para la enfermedad de las encías.

Una higiene bucal excelente es importante

La enfermedad de las encías empeora con el tiempo, por lo que mantener una higiene bucal adecuada puede ayudar a evitar que progrese hasta un nivel irreparable. La placa es una película bacteriana pegajosa que se acumula con el tiempo cuando uno no se cepilla los dientes ni utiliza el hilo dental con regularidad. Con el tiempo se endurece y forma sarro, que necesita una limpieza dental profesional para eliminarse. Si la placa y el sarro no se eliminan, las encías se inflaman e irritan, provocando la enfermedad de las encías.

Cepíllate los dientes dos veces al día con un cepillo de cerdas suaves y una pasta dentífrica con flúor. Los profesionales dentales recomiendan cepillar los dientes durante dos minutos o más para una salud bucodental óptima. La lengua también necesita un cepillado o raspado rápido.

Usar hilo dental al menos una vez al día ayuda a eliminar cualquier acumulación de placa entre los dientes. Limpia las partículas de comida atrapadas que pueden provocar enfermedades de las encías. Un portahilos simplifica el uso del hilo dental y es bueno para los pacientes dentales a los que les resulta difícil utilizarlo de la forma habitual.

Visite regularmente al dentista

Un dentista o higienista dental puede eliminar la placa y el sarro de los dientes durante una cita de limpieza. El odontólogo también comprobará si hay síntomas de enfermedad de las encías y recomendará un tratamiento si la enfermedad está presente.

Aumentar la ingesta de vitamina C

Algunos estudios han demostrado que los pacientes con carencia de vitamina C son más propensos a padecer enfermedades de las encías. Los pacientes pueden aumentar su resistencia a la enfermedad de las encías comiendo más naranjas, fresas y kiwis o tomando suplementos de vitamina C. La vitamina C tiene efectos antiinflamatorios que pueden ayudar a detener el sangrado y la inflamación de las encías, síntomas frecuentes de la enfermedad de las encías.

Consuma una dieta equilibrada

Una dieta equilibrada es beneficiosa para los dientes y vital para la salud en general. Es aconsejable reducir la ingesta de comidas y bebidas azucaradas, ya que pueden provocar caries. Las bacterias de la placa se alimentan de carbohidratos y azúcar, produciendo ácidos que dañan los dientes y las encías.

Beber suficiente agua

Una de las defensas naturales más eficaces del organismo contra la placa bacteriana es la saliva. El cuerpo libera más saliva después de comer para limpiar la placa y las partículas de comida. Una baja hidratación puede provocar sequedad bucal, que es uno de los principales factores que contribuyen a las enfermedades de las encías. Bebe suficiente agua a lo largo del día para mantener sanos los dientes y las encías. Tenga en cuenta que ciertas bebidas, como el café o el alcohol, tienden a provocar deshidratación.

Visita al dentista para una limpieza dental

El dentista puede detectar los primeros signos de enfermedad de las encías durante las citas dentales rutinarias, lo que significa que puede tratar los síntomas antes de que empeoren. Sólo una limpieza dental profesional puede eliminar el sarro de los dientes. El proceso también limpiará los restos de comida y la placa de las zonas de difícil acceso.

Si el paciente también padece una enfermedad periodontal, el dentista puede ofrecerle opciones de tratamiento útiles. El dentista puede detener la retracción de las encías y otros problemas de salud bucal con el raspado y alisado radicular. Las visitas periódicas cada seis meses permiten al dentista examinar las encías para detectar cualquier signo de enfermedad periodontal y desarrollar un plan de tratamiento si es necesario.

Dejar de fumar

Los fumadores tienen incentivos adicionales para abandonar el hábito. La enfermedad de las encías es más probable en los fumadores. Según los CDC, fumar deteriora el sistema inmunitario, lo que dificulta la lucha contra una infección de las encías. Además, fumar dificulta la recuperación de las encías dañadas.

Enjuague bucal antibacteriano

La Asociación Dental Americana recomienda utilizar un colutorio terapéutico para minimizar la placa, la gingivitis y la formación de sarro. Estos colutorios pueden adquirirse sin receta médica. Enjuagarse la boca ayuda a eliminar las partículas de comida y los residuos de la boca, pero no sustituye al cepillado y el hilo dental.

¿Tiene alguna enfermedad de las encías?

Su dentista puede proporcionarle tratamiento para la enfermedad de las encías incluso si ya padece la afección. Sus citas bianuales con el dentista pueden ayudarle a prevenir la enfermedad de las encías o permitirle detectarla antes de que empeore.